diumenge, 5 de desembre del 2010

Engranajes, puzzles y sopas de letras

Como bien vienen contando mis compañeros, el trabajo que nos traemos entre manos cada vez se va volviendo más complejo, la cadena de montaje se va expandiendo en cada etapa en nuevas direcciones y, los encajes de las piezas en el engranaje, cada vez suponen mayor dificultad.

Particularmente lo he vivido así mientras intentaba elaborar mi primera propuesta de mapa conceptual, algo que, a primera vista, creía relativamente sencillo de hacer si obviamos la lógica complicación que siempre comporta trabajar por primera vez con un programa, Cmap Tools en nuestro caso, que desconoces; por fortuna, éste acabó convirtiéndose en un aliado al poco de algunas pruebas, sin duda gracias a lo intuitiva que resulta su interfaz.

Pero, como decía, lo que sí resultó ser realmente complicado fue trasladar a una hoja en blanco toda una "sopa de letras" que me bullía en el cerebro convertida en algo significativo que describiera palabras con conceptos, ideas y proposiciones, que establecieran relaciones y fundaran jerarquías entre ellas con un sentido lógico y que, al fin, incorporaran y representaran apropiadamente los intereses en el proyecto de los cuatro miembros del grupo, mediante una estructuración del mapa que lo acabara por reflejar con la suficiente claridad.

En un momento dado de este proceso se me ocurrió pensar que si el proyecto de Digidoc_9 fuera una torre, ésta estaría situada en el centro de un cuadrado mientras nosotros, cada uno desde un cuadrante, la iríamos construyendo paso a paso. Así, en aras de mantener al máximo el equilibrio constante de "la torre", cada una de nuestras colaboraciones para el proyecto debía estar repartida de forma equitativa ya que, a mi entender, esto es fundamental para que todo el grupo continúe con cohesión implicado en el proyecto hasta el final.

Y fue así como llegué a la conclusión de que el mapa conceptual no debía ser sólo una representación conceptual y jerarquizada del proyecto si no que, además, tenía que dar cuenta de la presencia en el mismo de cada uno de los miembros del grupo y, por tanto, su plantilla base debía estar estructurada en relación a dicha presencia. Aclarado el camino, a partir de aquí, la clave fue desarrollar dicha plantilla base siguiendo el modelo de las formas modulares y fractales que se da en algunas estructuras conocidas de crecimiento o expansión.

Por hoy, nada más. Bueno sí, un vídeo apreciable que elogia las virtudes del iPad, y del artista (by David Kassan).



Digidoc_9, camina o revienta! Saludos.

4 comentaris:

Kenneth ha dit...

Hola Fermín,

M'he quedat garratibat del nivell de detall que s'aprecia al Ipad.
Jo que soc un negat per aquest tipus d'art gràfica (i per moltes d'altres també) veig que la tecnologia ens permet desenvolupar quasi qualsevol aspecte de nosaltres mateixos. Es una passada!
En fi, mirem d'aprofitar aquests avenços per a coses bones i que no haguem de córrer mai davant de la Guàrdia Civil com va fer el Lute. :)

Salut!

Kenneth

msa ha dit...

Realmente brillante la idea de pasar de un modelo jerárquico a uno radial. Si seguimos así, este proyecto terminará convirtiéndose en algo orgánico y cobrará vida, me veo oteando el horizonte desde las almenas de la torre norte!
(noroeste para ser más precisos)

Anònim ha dit...

Certament, el que va començar com un petit embrió esta agafant unes proporcions descomunals.

Haurem de seguir treballant amb calma i eficàcia per evitar que aquesta torre acabi patín el mateix destí que la famosa torre de babel.

Amb la suó del nostre front, edificarem un imperi.

fermincp ha dit...

Creo que correríamos delante de quien hiciera falta, incluso detrás; el espíritu de Orzowei nos tiene poseídos.

Gracias por los comentarios.